Con una gran muestra de carácter y un Luis Scola conmovedor (35 puntos y 13 rebotes), el equipo de Sergio Hernández derrotó por 94 a 87 a su par canadiense y sumó su segundo triunfo en el Preolímpico de México.
En base a un rendimiento parejo, sólido y comprometido de principio a fin, la Selección Argentina derrotó a Canadá por 94 a 87 y sumó su segundo triunfo consecutivo en el Preolímpico de México. Actuación maravillosa de Luis Scola quien terminó con 35 puntos y 13 rebotes.
Con la tranquilidad del festejo en la jornada inaugural, Argentina salió a jugar sin presiones ante el candidato Canadá. Con más serenidad y soltura. Por eso bancó la parada, incluso sin la dependencia ofensiva de Scola. Con valiosos aportes de los bases (Campazzo y Laprovittola) más una rotación extendida (los 12 jugadores ingresaron), el seleccionado le sostuvo la intensidad al rival e incluso le limitó varias de sus principales vías de gol.
Es más, ya en el segundo cuarto, los canadienses redujeron casi toda su estrategia a los arrestos individuales de sus NBA. Y cuando se despistaron Argentina pasó al frente (37 a 36) gracias a un lindo pasaje del ex base de Lanús (13 puntos al ET) y otro del capitán (15). La ventaja de 46 a 42 al descanso fue absolutamente justa.
Para el tercer cuarto Scola brindó un concierto que modificó la estrategia rival y hasta llevó a los mexicanos presentes en el estadio a aplaudir cada una de sus infinitas alternativas en la pintura. El ala pivote de los Raptors cerró el período con 18 puntos y algunas pinceladas de básquet de alto nivel. Pero ojo: los compañeros estuvieron a la altura de su destaque. Y por esa razón Argentina no perdió nunca la brújula. Abasteció a su líder sin necesariamente reducir todas sus acciones a él. El 71 a 66 final de cara al cuarto decisivo coronó el pasaje.
Ya en el último, el equipo olió sangre y salió a definir la historia. No importó ni la jerarquía del rival, ni las reacciones aisladas de los norteamericanos. Argentina necesitaba demostrarse a sí misma que podía dar un batacazo. Y así lo hizo. Con Laprovittola y Campazzo brillantes en la conducción, llegó al cierre con el control hasta desgastar definitivamente a los NBA rojos. Fue 94 a 87. Fue festejo y alegría, pero todo mesurado. Porque el torneo sigue. Este miércoles, el plantel de Oveja tendrá jornada libre y el jueves chocará con Cuba.
Fuente: Prensa CABB
Foto: Prensa FIBA
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