El Comité Olímpico Internacional nombró hoy a Beijing, República Popular de China, como la ciudad sede de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022.
La capital china fue elegida sobre Almaty, Kazakhstan, en la votación realizada en la 128º Sesión del COI en Kuala Lumpur. Beijing recibió 44 votos contra 40 de Almaty.
Como resultado, Beijing se convertirá en la primera ciudad en acoger tanto una edición de verano e invierno de los Juegos Olímpicos, tras la exitosa puesta en escena de la ciudad de los Juegos de Verano en 2008.
Justo después de la elección, representantes de Beijing, junto con el presidente del COI Thomas Bach firmaron el Contrato de Ciudad Anfitriona (click aquí para ver el contrato). Esta es la primera vez que el HCC, por su siglas en inglés se hizo público, que es el resultado de las recomendaciones del Programa Olímpico 2020 - un paquete de reformas que cambió de manera significativa el proceso de selección de la ciudad anfitriona.
Pekín pretende utilizar los Juegos para acelerar el desarrollo de una nueva área de deporte, la cultura y el turismo, y para fomentar el interés por los deportes de invierno en una región que es el hogar de más de 300 millones de personas en el norte de China.
Aunque el proceso de licitación para el 2022 se inició antes de la aprobación del Programa Olímpico 2020, las reformas ya han tenido un impacto significativo en los planes Olímpicos de Pekín. La Agenda Olímpica 2020 requiere un mayor enfoque en la sostenibilidad, la herencia, y la transparencia, mientras que por lo que es más fácil para las ciudades anfitrionas para adaptar los juegos que satisfagan sus necesidades en lugar de tratar de insertar una plantilla.
Beijing se aprovechó de la flexibilidad prevista en el Programa Olímpico 2020 para mejorar sus planes para los Juegos y reducir los costos. La ciudad va a depender mucho de los lugares existentes, incluyendo las construidas para los Juegos en 2008, como el icónico estado Nido de Pájaro.
El presupuesto propuesto por Beijing para la inversión en las aldeas, lugares de deportes olímpicos y otras infraestructuras asciende a 1.5 billones de dólares - significativamente menores que para los Juegos Olímpicos en el pasado. El proyecto de presupuesto operacional debe ser totalmente compensado por los ingresos procedentes de la venta de entradas, patrocinios de marketing y otros ingresos. Gracias a una contribución adicional del COI de aproximadamente 880 millones dólares para apoyar la puesta en escena de los Juegos Olímpicos de Invierno en 2022, Pekín confía en que será o bien el punto de equilibrio o de obtener un beneficio.
Además, el legado después de los Juegos y todos los lugares que se utilizarán permanentemente ya se han identificado para garantizar que las inversiones relacionadas con los juegos ofrezcan beneficios en los próximos años.
Texto: Damián Fanelli
Fuente y fotos: Prensa Comité Olímpico Internacional
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